Nadie ha
quedado vivo: soy el ùnico sobreviviente
en medio de la muerte y el horror pandèmico.
Todos han muerto, sin embargo, un dìa estuvieron vivos,
coleando y vivitos, como quien dice; despuès, vino la
Muerte y se los llevò carpiendo: atravesaron el Leteo en una barca,
incluso estaba Caronte esperando.
Todos han muerto mediante paros cardìacos, cànceres varios.
Solo yo aguardo la hora, condenado pulcramente, friamente prisionero